Estados de animo...

Me siento como nunca antes, que diablos importan todos los problemas si en este momento estoy pleno, perfecto, lleno, intenso, vivo. Como es que he dejado pasar tanto tiempo sin tocarla. No se aún tantas cosas de esta vida, no presumo de lo que desconozco, pero a veces pienso que debería actuar más que hablar. En estos tiempos debería ponerme a pensar en lo que hacen mis amigos, extraño a algunos, no siento nostalgias por ellos, pero me pregunto que hacen todos ellos, puedo irlos mencionando, pero no me atrevo a dejar a alguien sin dicha mención y ello se constituye en una situación complicada que no deseo afrontar, pero para cada uno de mis amigos les brindo dos besos, esos besos que lo son todo, como el primer beso de una madre o el primer beso de ses gran amor, mi desgracia es recordarlo todo, pocas cosas se me olvida, a veces en tono de broma me digo que recuerdo con exactitud mi primer quejido ante el mundo, por supuesto que hablo de cuando la partera me puso de cabeza y me dio una nalgada para que diera el primer grito ante la vida, eso que muchas veces me parece agresivo, es decir la respuesta a la vida o ese impulso externo fuera del útero porque tiene que ser un pequeño golpe, pero en fin así suele ser. Lo mío no fue llanto, ante ese primer instante motor, lo mío fue decirle a la partera lo linda que fue al traerme al mundo, pero que resultaba necesario que me acercara a mi madre porque deseba darle un beso por traerme al mundo con tanto amor, mis amigos dicen que es una exageración, la verdad es que fue así, ahora que nadie entendiera mi recién estrenado lenguaje, pues es otra historia que debería de contar. Cuando las cosas locas están presentes en todo lo que se hace, de que diablos sirve eso llamado cordura, así me pasa, así que me dedico a disfrutar, a no hacer de las cosas difíciles un atado de sentimientos sino a disfrutar, pienso que es lo mejor, al menos ahora me siento como nunca…