martes, 2 de octubre de 2007

imposible hacerlo solo


IMPOSIBLE HACERLO SOLO…

1

El camino al aeropuerto está bien fácil. Basta que se vaya por ese rumbo, tal como si fuera por alguna vereda. Cerca de aquí lo va encontrar, de paso se ahorra usted unos pesos, pues no pagara ningún peaje por usar la carretera. Yo miro a diario ese caminito, cada que salgo a pasear con mi bicicleta. Cuando recuerdo estas cosas, no puedo dejar de pensar en aquellas palabras:

Es un sitio hermoso, arenas blancas, un mar de azul intenso. Se necesita del mar, al menos me hace perder todo contacto con los problemas, es como si la realidad dejara de existir. Me dices que se llama el mezquital. A veces no quisiera saber nada, dejar de soñar, vivir una sola realidad. He gritado durante muchas noches pidiendo que alguien me rescate, parece que solo tú eres capaz de oír. Me alegra que así sea. Me embragado de tus olores, de tus sabores, de tus labios que se encuentran con los míos. Es necesario el mar, es el sitio donde puedo hacer todo esto: morir para entender que la realidad no existe. Para hacerme a la idea de que todo lo imposible en verdad existe. Para no preocuparme por saber lo que nadie sabe. Para llenarme de tu sabor. Para dejar pensar que tengo que morir y creer que la realidad si existe, sin el mar las cosas son imposibles, así que no te alejes del Mezquital, se que me va a conquistar.

Para recordar, para vivir, olvidando que lo imposible no es morir, sino vivir por siempre sin olvidar. Recordar, decir que si.

2

Quizá me preguntes que quiero, o me digas que yo deba tener ideas que muchas veces no comprendo, quizá me digas que debo ser fuerte, que debo ser capaz de guiar. Yo en realidad quiero una casa ala orilla del mar, un cuarto que tenga madera en el piso, un perro grande, recuerdos de los viajes interminables, quiero también unas bicicletas, que me leas cuando me quede ciego. Lo que más quiero es a ese alguien que me rescate, que quizá no entienda toda esta locura, pero que no me prohíba seguir en ella, no deseo que me arranque de esta soledad, porque al hacerlo sería como olvidarme de todo lo vivido en estos años, que sin ella(mi amiga soledad), jamás habría llegado a ese alguien, ese alguien que tiene tu rostro, tus labios tiernos, tus besos inquietos. Ese alguien eres tú, a ti te quiero.
Dices que todo lo que quiero es fácil, que pido poco, que quizá debería pensar en otras cosas más complejas. Acaso el amor no es complejo o es que habituado a la soledad me olvide de algunas cosas. En realidad pido lo que puedo dar. Desde que nos encontramos por primera vez, no se si tú te diste cuenta, pero el mundo empezó a estrecharse, llegara el momento en que estemos juntos por siempre, aunque para otros el mundo sea un mundo raro, pero qué cosas no suelen será raras, incluso el dejar de respirar puede parecernos raro, pero a diario muchos dejan de hacerlo, pero quizá pienses que se mueren aunque lo que en verdad hacen es mutar de sueños, ahora están perdidos camino al paraíso, yo te recuerdo que prefiero el Mezquital.

3

Cuando me miro en tus ojos, se me viene a la mente un mundo diferente, me olvido de todos los gritos dados, me olvido que me sentía muerto, ahora todo es diferente. Cuando estoy cerca del mar, imagino un banda de caballos blancos que corren por las arenas de un desierto gris, no se si existen los desiertos grises, pero el que imagino es gris, allí corren los caballos blancos, algunos los confunden con espuma de mar, yo digo que la brisa del mar es un suspiro, mientras que los caballos vienen con su estrenduoso galope. Mientras todo eso pasa, me he perdido en otra batalla, quizá nadie lo entienda, pero poco importa si tú me ayudas. Lo que quiero es no dejar de ver, lo que quiero es que tú me leas, lo que quiero lo tienes tú, es tu vida.

4

¿Con quién iras a la playa sino me dan la visa? Pienso tantas cosas. Creo que pocas son las gentes que en verdad se preocupan de mis ruidos, de mis gritos, de estos llamados para romper con la soledad, pero ya ves que muchas veces parece que no se ni lo que quiero. Pero decir que uno solo puede romper con la realidad es una locura, es imposible hacerlo solo. Al mar voy solo, pero no quiero tener una casita en la orilla del mar para vivir solo, siempre solo, cierro los ojos impacientemente, me pregunto, si es qué podré ver con estos ojos hasta mi último aliento, es larga la espera, aún faltan cincuenta años. Siempre solo, siempre solo, ya no quiero gritar, ya no quiero pedir ayuda.

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